Pesopluma: una década de libros y libertad editorial

El sello independiente Pesopluma, fundada por Paloma Reaño, Carlos Vela y Teo Pinzas, celebró sus diez años de trayectoria con una  jornada que reunió a lectores, autores y compañeros en un espacio donde los libros y el diálogo fueron los protagonistas. El evento se realizo en Casa Bulbo y fue organizado por Raíz Incubaideas (incubadora de proyectos de artes y culturas).

La tarde comenzó a las 4 p.m. y se desarrolló en medio den presentaciones de libros, lecturas y conversatorios. Pudimos legar a las 7:30 p.m., justo para escuchar el conversatorio Escritoras peruanas invisibilizadas del siglo XX, un diálogo clave para reconocer voces fundamentales de nuestra literatura que han sido opacadas por el canon. Participaron Verónica Villarán (Placeres Compulsivos), Violeta Barrientos (poeta y activista pro derechos humanos y LGTBIG+), y Fernanda Acosta y Mariangela Eráusquin (directoras del podcast Aquelarre Lector), quienes compartieron reflexiones sobre la persistente negación de autoras y la importancia de rescatar sus obras.

Fotos de Pesopluma

Una de las cosas que llamó nuestra atención es la constante crítica que se hace a las actividades que buscan enfocarse en el trabajo de autoras y disidencias, recibiendo acusaciones de ser espacios reduccionistas que no le dan cabida a hombres. Este es un gran error, dijeron las ponentes, ya que cuando se realizan eventos especializados en géneros literarios como terror y ciencia ficción o en obras de los autores del boom, no se dice lo mismo. No estamos comparando el trabajo de autoras y disidencias con los géneros literarios, porque no es lo mismo. Es totalmente necesario que existan estos espacios enfocados en literatura hecha por mujeres.

Otra de las cosas que rescatamos es la importancia de crear semilleras e incentivar la lectura desde pequeñas. Cuántos de nosotros tuvimos que leer en las épocas escolares clásicos como el Mio Cid o El Quijote, y fue gracias a la creatividad de nuestros profesores que pudimos digerir lecturas como esas. Pero qué ocurre cuando el índice de lectura es casi nulo y hablamos de poblaciones de las regiones donde el acceso a la educación y a los libros es menor (por no decir escaso). No solo es necesario llevar un plan lector a todas partes del Perú, sino que es importante que dentro de estas listas de libros existan autoras y perspectivas femeninas que son tan necesarias de (re)conocer.

Para el cierre del conversatorio se les pidió algunas recomendaciones a las 4 participantes, estas fueron sus respuestas:

• Lluvia y viento sobre Telumea Milagro de Simone Schwarz-Bart.
• Ensayos completos de Esther Castañeda
• Los libros de la editorial independiente Hipatia
• La mujer desnuda de Armonía Sommers
• El occiso de María Virginia Estenssoro
• Nefando de Mónica Ojeda
• El sepulturero de Lastenia Larriva

Más allá de la conversación, la celebración fue un encuentro entre personas que comparten el amor por la lectura y la apuesta por una editorial que, en una década, ha logrado consolidarse sin estar alineada a los intereses de las grandes casas editoriales. Un dato significativo que se mencionó es que cerca del 40% de su catálogo está compuesto por escritoras, una cifra que resalta en un contexto donde la representación femenina en el mundo editorial sigue siendo desigual.

Fotos de Pesopluma

Pesopluma es un ejemplo de resistencia en el panorama literario peruano. Su labor no solo se enfoca en recuperar textos valiosos de nuestra tradición, sino también en generar un puente con escritores y escritoras contemporáneas de otras partes de la región. En un mercado editorial dominado por tendencias impuestas y agendas comerciales, el trabajo de editoriales independientes como esta resulta esencial: son espacios donde la literatura no responde a las lógicas de consumo masivo, sino a la necesidad de preservar y difundir historias que, de otro modo, quedarían en el olvido.

¡Larga vida a Pesopluma!

Pueden conocer su catálogo en su web: https://pesopluma.net/