Bipersonal de dos artistas mejicanos: Ráfagas, de Omar Rodríguez-Graham y La caída del sol negro, de Agustín González. Las construcciones del presente están cimentadas sobre los escombros de los fantasmas del pasado, que distorsionan memorias, destruyen narrativas y crean historias renovadas en la propuesta artística de Omar Rodríguez-Graham. Las piezas del artista tienen un trabajo de desintegración.
Basándose en imágenes icónicas de la pintura occidental, OMR se apropia de sus trazos, al tiempo que re-ensambla composiciones figurativas en pinturas abstractas, otorgándoles nuevos parámetros. Sin embargo, el artista no transgrede las restricciones pictóricas ni se aleja de una idea trascendental en el arte: todo acto destructivo es un acto de creación.
Por su parte, en La caída del sol negro, Agustín González presenta una serie de pinturas que se constituye a partir del diálogo, entre lo pictórico y semántico, que el artista establece a partir de un pequeño fragmento escrito por Eduardo Galeano sobre la utopía: “La utopía está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y el horizonte se desplaza diez pasos más por allá. Por mucho que camine, nunca la alcanzaré. Entonces, ¿para qué sirve la utopía? Para eso: sirve ¡para caminar!”
La exposición está organizada a partir de escenas de pequeño formato que aluden al paisaje, el camino y el horizonte; escenas aisladas y solitarias que introducen a personajes que se pierden en medio de los últimos rayos de un sol casi extinto, cuya luz cobija los paisajes y difumina a los personajes retratados por González, poniendo énfasis en la estructura del color, el cuerpo y los procesos de la pintura.
Ráfagas y La caída del sol negro estarán abiertas al público hasta el sábado 31 de octubre 2015, de lunes a viernes de 10:30 am a 8 pm y sábados de 12 pm a 8 pm.