Gonzalo Ladines presenta su ópera prima 'Como en el cine'. / Foto: Javier Gragera
Gonzalo Ladines nos recibe en la zona de cafetería del cine y nos ayuda a mover la mesa para sentarnos junto al cartel de la película. Ahora ya tenemos un buen encuadre para la foto, con las figuras de Manuel Gold, Pietro Sibille, Andrés Salas y Gisela Ponce de León, los cuatro personajes principales, en segundo plano. Lo primero que nos cuenta Gonzalo es que lleva una doble vida, tal cual el mismísimo Superman: en la vida real trabaja como realizador para agencias de publicidad, pero cuando quiere despegar los pies del suelo y echarse a volar le da por convertirse en director de cine. Ahora parece que el superhéroe se impone al hombre vulgar y corriente, y Gonzalo presenta en cartelera su ópera prima, Como en el cine, una comedia generacional llena de guiños al universo cinéfilo que no pretende otra cosa que hacerte pasar un buen rato y reivindicar a manera de fábula desenfadada lo importante que es luchar por alcanzar tus sueños.
Mateo Chiarella posa en el escenario del Teatro Ricardo Blume. / Foto: Javier Gragera
En Búnker, la nueva propuesta escénica de Teatro Aranwa, los que manejan los hilos detrás del telón son padre e hijo. Jorge Chiarella Krüger la dirige en base a lo que ha escrito Mateo Chiarella Viale, su hijo. Mateo Chiarella nos cuenta que se crió con el teatro metido dentro de casa, y que fue para él un gesto natural dedicar su vida a la creación de ficciones sobre las tablas. Lo que no se hereda, no se hurta, dice el refrán. Justo después de dirigir un taller, y mientras Mateo Chiarella le mete cuchara a una lonchera antes de irse corriendo a la universidad, el dramaturgo nos concede una entrevista en un patio al aire libre del Teatro Ricardo Blume. Indagar en las motivaciones de su última obra nos hace hablar de Lima, de la sociedad que la habita, y de cómo la palabra ‘búnker’ es una metáfora que puede darle significado a muchas cosas.
Juan Carlos Pastor interpreta a Salazar Bondy en sus últimos días de vida. / Foto: Difusión
Sebastián Salazar Bondy es un autor incombustible en el tiempo, siempre vigente a pesar de haber muerto hace ahora 50 años. Su celebridad se debe tanto a su prolíficas intenciones como escritor –fue periodista, poeta, cuentista y dramaturgo– como a su entusiasmo por dinamizar la escena artística de Lima como promotor y crítico cultural.
Héctor Gálvez durante el conversatorio en el cineclub La Ventana Indiscreta. / Foto: Javier Gragera
Héctor Gálvez nos dice que la historia de NN está basada en hechos reales. Todo surge a partir de una anécdota que le contó una amiga que trabajaba como fotógrafa forense. Durante la exhumación de una fosa común en un paraje andino, hace ahora varios años, ella y el resto del equipo se toparon con los restos de un cuerpo de más, con un cadáver que nadie reclamaba y que tenía la foto en blanco y negro de una muchacha guardada en el bolsillo de su camisa.
CocoRosie se ha ganado la simpatía de un público ansioso por encontrar sonidos diferentes y posturas no convencionales.
No todas las bandas pueden presumir de ser acogidas por un museo, como si su música –o su performance– se tratase de una obra de arte. CocoRosie llega a Lima y el MAC abre sus puertas para recibir a la dupla conformada por las hermanas Sierra y Bianca. Tal vez todo tiene más lógica de lo que aparenta a simple vista. O quizá no. Poco importa: el arte contemporáneo se basa tanto en la duda como en la imposibilidad de definir qué es una obra de arte y que no. ¿La música se puede exponer como un cuadro o una escultura? Por qué no.
Leonardo Torres protagoniza esta adaptación del clásico de Shakespeare. / Foto: Difusión
En el ocaso de su vida, Shakespeare se volvió un autor inesperado. A principios del siglo XVII, el dramaturgo inglés llevaba la vida de un asceta. Había decidido instalarse en su casa de Stratford, lejos de Londres, como quien pretende darle la espalda al resto del mundo. Pero Shakespeare no se apartó de la vida pública para dejar de escribir, sino para encontrar un espacio idóneo para reflexionar, para hacer balance de casi toda una vida vivida y volcar aquello que iba descubriendo en sus nuevos textos. Las obras de esta época son conocidas por la crítica como “romances” y no se parecían a nada de lo que el prolífico autor había escrito antes. En ellas se revela un Shakespeare inconformista, melancólico, incomprendido; un Shakespeare crepuscular.
El mexicano Damián Alcázar hace una excelente interpretación de Magallanes, militar retirado que trabaja como taxista.
El debut de Salvador del Solar como director de cine es prometedor. Hay muchas cosas buenas en esta producción peruana, que tantos años le costó sacar adelante al que hasta entonces se ganaba la vida al otro lado de la cámara, frente a ella, como actor. Magallanes es un thriller apasionante, bien construido, que se sumerge en un drama enraizado en los años de violencia política para conmover las conciencias.
Los escritores-luchadores compiten enmascarados frente al público. / Foto: Kami Velvet
Entrevistamos a Christopher Vásquez, el rostro tras la máscara de Lucha Libro, campeonato de improvisación literaria que celebra su 5ª edición en Lima. Me gustaría presumir de que no tengo nada preparado, de que voy a improvisar en esta entrevista, pero no es cierto: en mi cuaderno tengo un largo listado de frases acotadas entre signos de interrogación. Igual el diálogo siempre es un terreno fértil para lo inesperado. Que empiece la pelea: Primer round.
José Diez Canseco, co-dramaturgo de la obra de teatro Gol / Foto: Javier Gragera
Hubo un tiempo en el que el Perú lograba clasificar a los Mundiales de fútbol. La última vez fue en 1982, y coincidió con el año en el que nació José Diez Canseco, co-dramaturgo y asistente de dirección de la obra de teatro Gol, que llega a su última semana de temporada en el ICPNA de Miraflores. José Diez Canseco forma de esa generación que nunca vio a Perú jugar un campeonato mundial. Nos sentamos juntos para hablar sobre la obra que tiene por título un grito para él tantas veces enmudecido. Parecía que íbamos a conversar sobre fútbol, pero terminamos por hablar de cosas más serias.
Werner Herzog es homenajeado en el Festival de Cine de Lima 2015
El cineasta alemán Werner Herzog, con una trayectoria cinematográfica íntimamente vinculada con el Perú, será homenajeado con una retrospectiva que incluye once de sus trabajos más notables, que incluyen Fitzcarraldo (1982), Aguirre y la cólera de Dios (1972), y El pequeño Dieter necesita volar (1997). Werner Herzog también estará presente en la fiesta de clausura del festival, el sábado 15 de agosto, y participará en un conversatorio para presentar en Perú su libro: Guide for the perplexed.
Werner Herzog, quien lleva más de medio siglo trabajando detrás de un cámara, es un todoterreno del cine europeo. Considerado como uno de los directores experimentales más relevantes de finales del siglo XX, Herzog también ha sido guionista, actor y director de ópera. Es difícil abarcar su obra en unas pocas líneas, pero si algo ha dejado claro el cineasta teutón a lo largo de su larga filmografía es su preferencia por los antihéroes, personajes de singular personalidad enfrentados a un mundo hostil, para los que la lucha por su supervivencia o por defender sus ideas está siempre abocada al fracaso.