La última vez que fui a concierto de esa naturaleza fue hace dos años, en Quilca. Esa tarde se presentaron varias bandas en protesta contra el gobierno de Dina y el grupo por el que fui era Eutanasia. El jirón había sido tomado por guitarras eléctricas, un parlante que sonaba hasta el culo y protegido inútilmente por uno de los organizadores que con megáfono en mano pedía que “pogueen más lejos, conchatumadre”.
Hace algunos meses, en marzo del año pasado para ser más precisos, atormenté a mis alumnos con una pregunta sobre la cual debían reflexionar para un ensayo. ¿Puede el amor de uno solo alcanzar para una relación de dos?
El Juanito ha empezado a llenarse. Hace tan solo unos minutos una pareja de gringos eran de las pocas personas que se encontraban en el bar. Hoy juega Perú y nadie de los citados lo ha recordado. Carlos y Ana están por llegar.
España estaba en crisis, el sistema económico no era tan sólido como se pensaba y en Barranco no había ni una sola librería. A veces, la casualidad es una buena manera de comenzar un proyecto que involucre tantos afectos y cambios.
En el año 2017 se publicaron dos libros que son citados con frecuencia cuando se trata de hablar sobre el rock peruano, en particular sobre el subterráneo. Estos libros son Pank y revolución: 7 interpretaciones de la realidad subterránea, de Shane Greene y Desborde popular, de Fabiola Bazo.
Desde que salió Conversación en la Catedral, esa monumental novela de Vargas Llosa sobre la dictadura de Odría, el Perú ha quedado huérfano. Lamentablemente no de dictaduras, sino de nuevas novelas que le hablen a ella, que pretendan abrir un diálogo y sugerir un diagnóstico, por más pesimista que éste sea.
Fue en el año 2010 que a la filósofa y dramaturga francesa Mériam Korichi se le encargó un proyecto distinto que pudiera rendir tributo a la filosofía, que propusiera hablar de ella. ¿Cuán complicado puede resultar hacer algo así? La inquietud proviene, desde luego, de un observador cuyo país vive una disminución constante en su interés por las humanidades para darle paso directo a la inmediatez.